Las coronas dentales son prótesis que se utilizan para recomponer y devolver la funcionalidad y la estética a un diente dañado.
Las coronas son fundas que se cementan sobre un diente natural y actúan como su parte exterior y visible. El diente que soporta una corona dental se modifica ligeramente para garantizar un encaje perfecto.
En primer lugar, se tallará ligeramente el diente que va a soportar la corona definitiva. Después tomaremos un molde de tu boca que se envía al laboratorio donde fabricarán tu prótesis definitiva.
Mientras esto ocurre, si es necesario, podrás llevar una corona temporal hasta la colocación de la definitiva. Una vez colocada, podrás sonreír, hablar y comer con normalidad con una estética totalmente natural.
Hay varios motivos por los que puedes necesitar una corona dental:
Una pieza dental endodonciada o afectada por una caries puede necesitar una corona para mantener su funcionalidad y estética.
Detienen el deterioro y refuerzan la pieza para que pueda seguir funcionando con normalidad.
Una corona permite cambiar el aspecto de un diente de forma instantánea.
